contadorciyo de intrusos

miércoles, 10 de junio de 2009

Ser Landuin

me desperte con energias para ese nuevo dia, con toda la ilusion de hacerme un nombre como caballero en las justas del torneo ke se celebraba en honor al cumpleaños de la reina.
segun sali del pabellon me encontre con Beren mi joven escudero.

- como a dormido oi mi señor?

- bien Beren, espero ke tu tambien, tienes lista mi armadura? no falta muxo para ke empiezen los combates y kiero estar preparado.

- no señor aun no lo he preparado, voy a ponerme con eyo, en un momento lo tendre listo.

-vale, mientaras tanto voy a dar un paseo para despejarme.

segun paseaba entre los pabellones de los caballeros de mayor renombre choke con una dama

-oh loseiento ser, culpa mia, soy muy despistada

-no es nada jaja, se dice que encontrar una joven tan bella antes de un combate trae buena suerte.

-participa mi señor en las justas del torneo?

- asi es, no se si me conocera, permiteme ke me presente, soy Ser Landuin de Mousillon, aunke me apodan el salvador de inocentes, desde ke ayude a los habitantes de una aldea del norte a acabar con los males ke les producia un apestoso ogro.




- jajaja encantada ser, mi nombre es margaery, hija de lord Meltibon de vallelargo.

-un placer milady. bueno, ha de disculparme pero se me hace tarde, mi escudero me espera para prepararme antes del torneo, espero verla en las gradas, ¿puede ser?

-asi sera, no todos los dias se conoce de esta manera al salvador de inocentes, ser landuin jejeje

Fue extraño, se dio media vuelta y la vista se me fui hacia sus perfectas caderas como se va un trozo de pan al estomago de un mendigo. Muxas donceyas dejaron de serlo bajo los aposentos de mi castiyo, pero esa joven tiene algo ke no consigo entender... kizas me este volviendo loco... kizas...

volvi para el pabeyon y Beren me estaba esperando con todo listo, ala media ora ya nos estabamos dirijiendo hacia las lizas.
Observamos con detenimiento los primeros combates de la mañana, caballeros ke desmontaban con ferocidad a sus contrincantes pasaban sin dificultad, se notaba ke el nivel del torneo atrajo a caballeros de alto rango, mas de uno habia coincidido conmigo en alguna batalla.

mi turno yego al medio dia, tendria ke descabalgar a ser Kelyon, segun se rumoreaba no era gran cosa como jinete, con lo ke deberia de intentar buscar un golpe con el ke perdiera el ekilibrio.
las trompetas sonaron... los nervios afloraron, pero me trankilice, por un momento cerre los ojos y me acorde de sus curvas...
pero no , tenia ke concentrarme, si perdia aora jamas alkanzaria remombre y honores entre los mejores del reino.
Cabalge con furia y baje la lanza pronto, me sentia bien, era uno solo con el caballo y cuando yego el instante del impacto las astillas saltaron, me levante el visor y vi ke lo habia descabalgado, senti un gran alibio...
rompi otras 2 lanzas contra el segun decretaban las normas del torneo y pase a la siguiente fase la cual me correspondia disputar al atardecer.
Me dispuse a descansar y tomar una comida ligera al medio dia cuando la vi de lejos, estaba hablando con otras damas de la corte en los palcos, su pelo rojizo me atraia como las llamas vivientes y sus bellos ojos castaños me hipnotizaban... con lo ke acabe delante de eya otra vez.

-hola mi señora os gusto el espectaculo?

-Ser Landuin! me diste una grata sorpesa, imaginaba ke lo ariais bien, pero fue realmente increible.

- jajaja no es para tanto, solo es habilidad y algo de suerte, me toka en la siguiente ronda al atardecer, espero ke podais volver a verme. no e dejado de pensar en vos desde nuestro fortuito encuentro.

derrepente, su sonrisa se torno descarada y me contesto

-os confesare ke yo tampoko Ser, me alegra saber ke vos sentis lo mismo

- en ese caso, kizas le apetezca a mi señora dar un paseo mañana por la mañana.

- eso me encantaria, sera un placer acompañaros

- ke asi sea, me despido, las tripas me piden comida y tengo ke estar preparado para mi combate de la tarde.

Me fui a comer algo, la tarde discurrio trankila, aunke con mas dificultad ke por la mañana consegui derrotar a mi oponente.



A la mañana siguiente pase a recojer a lady margaery y la llebe a dar un paseo por el boske cercano, la clara luz nos debaja sombras eternas... las pisadas entre el muyido suelo de hojas otoñales... durante ese instante no escuxaba lo ke me decia, parecia ke los sentidos se me habian blokeado y solo keria tenerla cerka, la suavidad de su pelo , con los desteyos delos fuertes rayos del amanecer... lo mejor yego cuando nos sentamos bajo un viejo olmo... era pasion, era fuego, su melena me abrazaba y me sentia suyo... una vez tras otra.

cuando el sol estaba sobre nosotros desperte, me habia kedado dormido y eya sobre mi, apuradamente volvimos a las lizas del torneo, esa tarde tenia el combate final, el ke me daria la gloria o el olvido, necesitaba estar totalmente concentrado.

Las horas pasaron... y yego el momento, Beren yebaba las riendas del caballo, yo estaba a su lado nos estabamos dirigiendo hacia el palco para presentarnos ante el rey y la reina, pero por el camino yego corriendo hacia mi.

- Landuin! landuin!

Me abrazo, el sentimiento era tan agradable... por un momento cerre los ojos y me olvide de todo.

-calmate, sshh calmate, ke pasa?

- eh de contarte algo

-te escuxo, ke ocurre?

- es tu oponente de la justa, Ser Stifan, es... mi prometido

-tu.. tttu prometido?

- si... mi padre, me prometio al heredero de la familia Clestingon para ganar rikezas y tierras a mi costa.. pero yo no le kiero... una vez...nos conocimos, le dije ke no keria casarme con el y me hizo daño, me dijo ke seria mi esposa lo kisiera o no y ke no podria hacer nada para impedirlo.

- y ke puedo hacer yo?

- no te lo deberia de pedir... pero porfabor, si el muere, no tendre ke casarme con el, y podremos estar juntos, mi padre lo comprenderia, tienes tierras y eres caballero, seguro ke accederia a nuestro matrimonio...

- pero yo.. no.. no se si puedo, seria totalmente deshonorable matar a alguien en una justa y tendria poner un refuerzo de hierro en la lanza de torneo, y no esta permitido...

- porfavor Landuin, ... hazlo por mi, ayudame y seremos felices para siempre, te lo prometo.

Era eya, o todo lo demas... ke podia hacer... estaba hundido en un mar de confusiones, demasiadas cosas me daban vueltas en la cabeza.. perderia mi honor e incluso podria ser condenado por el rey... pero... era eya... eya antes ke nada.
Si no lo hacia pasaria el resto de mi vida preguntandome como hubiera sido estar coneya... ser feliz.

- vale, te lo prometo lo are.

-gracias , gracias graciass! te quiero y siempre lo are.

me fui hacia el palco y me presente como el salvador de inocentes... pero no muxo mas me duraria ese apodo, pese a ke ser Stifan podia ser un mal hombre y un pesimo caballero, no tenia pruebas de nada y estaba apunto de matarlo... ke los dioses me amparen, todo lo ago por eya.

sin darme cuenta ya estaba sobre el caballo, el sudor me goteaba sobre la cara, el calor ke producia el casco era inumano, pero ya kedaba poko, mi caballo empezo a correr... y otra vez tube la sensacion ... mis sentidos se habian desconeztado y solo pensaba en eya... y la lanza, preparada a conciencia para matar se dirigio hacia el cueyo del caballero... la colision fue espantosa... y cuando me di cuenta la sangre empapaba todo.. el caballero yacia en el suelo.. la estampa era horrible... sin duda era peor ke cualkier muerte ke hubiera causado con anterioridad en una bataya, esto no tenia honor alguno...


me kede tendido en el suelo sin saber ke hacer, ke decir... y cuando me di cuenta, me estaban agarrando por los brazos y me dejaron ante el rey, y procedio a hablar.

-Ser Landuin, nose los motivos ke te han yebado a cometer tal atrocidad, pero ai ke estar loco para pensar ke no veriamos ke as usado una lanza reforzada aproposito para matar a tu oponente, por el poder ke se me a sido concedido declaro ke seas ajusticiado, aki y aora, pero antes kisiera saber ke te ha yebado a hacerlo, si eske ai algun motivo.

- ni yo mismo lose mi señor... fue ... eya..

parecia tonto hablandole asi al propio rey, pero me era dificil vocalizar cualkier palabra...
mire hacia los lados, haber si la veia... pero no estaba... me habia abandonado... necio de mi...
no pude ser mas estupido...

- mi señor, habia una joven... margaery, hija de lord Meltibon señor, eya me dijo ke el le hizo daño... ke no la keria.. si le mataba nos podriamos casar...

me di cuenta ke alguien se acerco al rey y le dijo algo al oido.

-Mentiras! , me acaban de hacer saber ke lord Meltibon solo tiene hijos varones, ya eh oido suficiente, ke venga el verdugo, tras el ajusticiamiento se acabaron las festibidades, ya se ha derramado suficiente sangre por oi.

Entonces lo entendi, todo fue una farsa, seguro ke la muerte de ese caballero la beneficiaba de alguna manera.

y ayi, con la cabeza sobre un tokon, me di cuenta de lo estupido ke fui al creer ke se puede sentir en dos dias lo ke se tarda una vida en sentir ...
solo pude cerrar los ojos y vi la muerte,
la muerte mas bella...
la vi a eya.



FIN

jueves, 4 de junio de 2009

Hombres quebrados

Casi todos son gente sencilla, hombres del pueblo que nunca habían estado a más de media legua de la casa en que nacieron hasta que un día, un señor cualquiera se los llevo a la guerra. Mal vestidos y mal calzados, marchan tras sus estandartes, a veces sin más armas que una guadaña o una hoz, o una maza que se han hecho ellos mismos atando una piedra a un palo con tiras de cuero. Los hermanos marchan con los hermanos; los hijos, con los padres; los amigos, con los amigos. Han oído las canciones y las anécdotas, así que caminan con el corazón anhelante, soñando con las maravillas que verán, con las riquezas y la gloria que conseguirán. La guerra les parece una gran aventura, la mayor que vivirá la mayoría de ellos.
Luego prueban el combate.
Algunos se quiebran nada más probarlo. Otros aguantan años, hasta que pierden la cuenta de las batallas en que han intervenido, pero alguien que sobrevive a cien combates puede quebrarse en el ciento uno. Los hermanos ven morir a sus hermanos, los padres pierden a sus hijos, los amigos ven a sus amigos tratar de volver a meterse las tripas después de que los haya rajado un hacha.
Ven caer al señor que los llevó allí y, de repente, otro señor les grita que ahora lo sirven a él. Reciben una herida y, cuando todavía la tienen a medio curar, reciben otra. Nunca tienen comida suficiente; el calzado se les cae a pedazos de tanto caminar; la ropa se les desgarra y se les pudre, y la mitad se caga en los calzones porque ha bebido agua que no era potable.
Si quieren unas botas nuevas, una capa más caliente o, tal vez, un yelmo de hierro oxidado, tienen que quitárselo a un cadáver; no tardan en robar también a los vivos, a los aldeanos en cuyas tierras luchan, a hombres como los que eran antes ellos mismos. Les matan las ovejas y les roban las gallinas, y de ahí a llevarse también a sus hijas sólo hay un paso. Y un día miran a su alrededor y se dan cuenta de que todos sus parientes y amigos han desaparecido, de que luchan al lado de desconocidos y bajo un estandarte que ni siquiera identifican. No saben dónde están ni cómo volver a su hogar; el señor por el que luchan no sabe cómo se llaman, pero ahí está siempre, gritándoles que formen una línea con sus lanzas, sus hoces, sus guadañas, para defender la posición. Y los caballeros caen sobre ellos, hombres sin rostro envueltos en acero, y el retumbar de su ataque parece llenar el mundo...
Y el hombre se quiebra.
Da media vuelta y huye, o se arrastra entre los cadáveres de los caídos, o se escabulle en plena noche y busca un lugar donde esconderse. A esas alturas, los hombres quebrados ya ni piensan en volver a casa. Los reyes, los señores y los dioses les importan menos que un trozo de carne medio podrida que les permita vivir un día más, o un pellejo de vino agrio con el que ahogar sus miedos unas horas. Viven de día en día, de comida en comida; son más animales que humanos.

esto es la edad media.

esto es cancion de hielo y fuego.


miércoles, 3 de junio de 2009

viejos tiempos

estos dias de verano, de sol, me recuerdan años pasados en los ke poko importaba, habia muxo ke descubrir, muxo ke hacer, muxas locuras ke realizar, peliculas americanas como american pie, o colega donde esta mi coche, son la encarnacion de ese espiritu jovenzuelo.

la musika corria acargo de los grupos californianos estilo blink o sum 41, sobretodo.

muxos recuerdos, siempre con una cocacola en la mano




xaoo!